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    Sarita Esses ʻEl café está servido’

    Sarita Esses, emprendedora de ‛El Café con Teclas’, comparte su experiencia de un año en la transformación de su sueño en una cafetería real.

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    Por Redacción Investor Lifestyle
    Fotos Efraín Álvarez

    Sarita Esses firmó el contrato de alquiler hace más de un año, y ahora el aroma a café finalmente flota en el aire de su pequeño local. Esta ilusión la había cultivado como la semilla de un poroto durante casi 10 años, desde que registró el nombre de su columna, Café con Teclas. La posibilidad de expandir su marca a un lugar físico, donde pudieran destacar todas las cosas que le gustaban e inspiraban, era como un cometa que aparecía ocasionalmente en su mente. A principios de 2022, decidió lanzarse al agua. Sarita se encuentra ahora mirando satisfecha a su alrededor y se dice a sí misma maravillada: “Wow, este espacio es mío”. Sin embargo, está dispuesta a admitir algo: hace aproximadamente siete meses comenzó a sentir pánico. Estaba tan inmersa en la selección de muebles y la compra de vajillas que se olvidó de que no sabía nada sobre cómo diseñar un menú ni cómo administrar un negocio de comida.

    Sarita destaca la importancia de equilibrar la pasión con la realidad financiera al emprender, resaltando que un enfoque lógico y estratégico es esencial para el éxito empresarial.

    Estaba clara en que su cafetería debía ser un lugar exquisito; tenía una idea vaga de que todo en el menú debía ser hermoso y delicioso, pero eso era como estar en Panamá y querer ir a Kenia: sabes lo que quieres, pero no sabes cómo llegar.

    Para una novata como ella, la curva de aprendizaje resultó ser bastante sinuosa. Esto es lo que Sarita ha aprendido hasta ahora:

    · “Es crucial fijarse en lo que NO dice el contrato”. Siempre le hacen hincapié en leer las letras pequeñas, pero se dio cuenta un poco tarde de que también es igual de importante anticipar lo que no se menciona en el contrato. Para esto, se necesita una dosis saludable de malicia y clarividencia.

    · “Pasos tímidos son buenos para meterse en agua fría, pero no para iniciar un negocio”.

    Si ya has emprendido el camino, necesitas ser asertiva y tener un buen mapa.

    “Los números deben cuadrar para tener un negocio rentable, no un pasatiempo costoso”.
    — Sarita Esses

    · “Las dudas son como zancudos: sacúdelas como puedas, porque llega un momento en que no sirve de nada preguntarte por qué te metiste en esto”. En su caso, compró un portafolio y se sumergió en Pinterest.

    Pasó semanas recopilando ideas, recetas e inspiración; consultó con personas que con gusto compartieron sus conocimientos y formó un excelente equipo de trabajo.
    Y algo maravilloso sucedió: el proyecto comenzó a tomar forma.

    · “Nada cuesta lo que parece; todo vale mucho más”. Es importante tener en cuenta esto al calcular la inversión.

    · “La burocracia consume cantidades inimaginables de tiempo y puede agotar tu paciencia. Debes gestionar todo lo que puedas con tiempo. Haz hoy lo que podrías haber hecho ayer”.

    ·“Resulta que en este país se deben pagar todo tipo de trámites, impuestos y permisos”. No saber algo no te exime de las consecuencias, así que es importante estar bien informado.

    · “Soñar es hermoso, pero los números deben cuadrar para tener un negocio rentable y no un pasatiempo costoso. Por lo tanto, además del corazón, debes usar la cabeza”.

    · Se dio cuenta de que, como en todo en la vida, existe una diferencia marcada entre “expectativa” y “realidad”. Esto no es necesariamente algo negativo, pero es importante saber adaptarse y, si es necesario, cambiar de rumbo.

    Por último, nos recuerda que si bien los sueños son el motor inicial, la planificación, la resiliencia y el enfoque en los detalles es lo que verdaderamente convierte una visión en una empresa exitosa. Sarita nos inspira a abrazar nuestros anhelos con valentía y afrontar los desafíos con determinación, recordándonos que, al final del día, la recompensa de convertir un sueño en realidad es invaluable.

    El café está servido. Sarita mira el local y los platos sobre las mesas. Se siente satisfecha consigo misma y, sobre todo, agradecida con el Todopoderoso por permitirle descubrir que tiene la capacidad de soñar, idear y crear.

    Bienvenidos a El Café con Teclas.

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