Hay máquinas que no solo se conducen: se sienten. Algunas nacen para revolucionar; otras para resistir el paso del tiempo. Pero unas pocas logran ambas cosas: se convierten en símbolos. Así ha sido el viaje del Fat Boy de Harley-Davidson, una silueta que marcó la cultura de las dos ruedas desde 1990 y que hoy, tres décadas después, renace con la fuerza de la memoria y el pulso del futuro. La edición limitada Gray Ghost no es solo una moto, sino una declaración de principios. De estilo, de potencia, de lo que significa mirar hacia adelante sin olvidar lo que fuimos. En una era de automatización, sostenibilidad y diseño inteligente, este modelo demuestra que la autenticidad también evoluciona. Que lo clásico no está reñido con la innovación. Que el rugido del motor puede ser, también, un eco de la historia.
2 detalles de carrocería
- Acabado ‘reflection’. Capa PVD en tanque y guardabarros que logra efecto espejo metálico, semblante cromado brillante resistente a la corrosión.
- Elementos nostálgicos. Asientos con flecos, correa de tanque de cuero, insertos amarillos y medallón con alas replican estilo clásico Fat Boy.
2 detalles innovadores
- ‘Lighting LED’. Faros, luces traseras y de freno completamente LED, mejor visibilidad e identidad moderna.
- Conectividad mejorada. Puerto USB‑C accesible, consola instrumental con velocímetro analógico junto a pantalla digital multifunción actualizable.
3 características técnicas
- Potencia aumentada. Motor Milwaukee‑Eight 117 Custom entrega 101 CV (75 kW) y 171 Nm, mejorando potencia y torque respecto al modelo anterior.
- Suspensión ajustable. Horquilla de 49 mm con válvulas ‘dual‑bending’ y amortiguador trasero con ajuste hidráulico para óptima comodidad bajo diferentes cargas.
- Modos selectivos. Tres modos de conducción (Road, Rain, Sport) con ABS/C‑ABS, control de tracción y sistemas electrónicos para mayor seguridad.
